La Oficina Bancaria

About the Book

Todas las entidades financieras suscribirían la siguiente máxima “nuestro activo más importante son los empleados”, pero hasta qué punto hacen de ellos el motivo principal de su estrategia.Frente al convencionalismo actual, este libro aboga por una mayor autonomía de la oficina bancaria, por una descentralización de la planificación comercial…, poniendo de manifiesto cómo las oficinas bancarias pueden ser más eficientes, qué responsabilidades tienen los directores y sus empleados, pero también, qué responsabilidades tienen sus organizaciones. No solo reivindicando para la oficina bancaria un mayor protagonismo sino también una mayor confianza en las personas que las integran.Aquellas entidades financieras que reconozcan estar centrados en sus empleados e incorporen esto como uno de los motivos fundamentales de su estrategia; potenciando, reteniendo el talento propio y atrayendo el de sus competidores, obtendrán una ventaja competitiva de primer orden.Si una entidad financiera quiere centrarse y orientarse al cliente el paso previo lo constituye centrarse en sus empleados, pero estar centrados en las personas que componen la organización, no solo requiere una preocupación por su satisfacción económica sino también por su satisfacción emocional. Supone una vuelta a lo simple, al humanismo, a la confianza en las personas, algo que algunas entidades financieras nuca deberían de haber abandonado.

About the Author

Robert j. Alan es Licenciado en Derecho y Master Universitario en Gestión de Entidades Financieras. Lleva más de 15 años vincuado al mundo de la asesoría financiera (entidades financieras)