Cara Invisible

La petición era una carta y mensaje conmovedor pero sobre todo de clemencias. El tiempo comenzó a transcurrir y la nota tenía que llegar a la oficina de J.C.R antes que fuera tarde, también antes que Star fuera puesta en la cápsula que la llevaría a la muerte eterna o a la Tierra. Mientras el cielo lloraba, el ángel luz volaba a trillones de billones de millas rumbo a las oficinas del máximo intercesor, abogado nuestro. Cuando el ángel descendía la puerta del inmueble se cierra y la carta llega demasiado tarde, ¡Muy tarde!

Star por otro lado estaba atrapada en su propia pasión y condena, era cosa de minutos su partida. El anciano divino y máximo Juez llegó hasta la puerta del hoyo negro donde ella iba a ser arrojada al infierno; bañado en lágrimas lloraba inconsolablemente, la suerte de Pure era irremediable y su enfermedad incurable, desgraciadamente no había otro camino que este, Star será arrojada al infierno o a la Tierra.

El ángel que llevaba el mensaje deslizó el sobre por la ranura de la puerta, luego comenzó a caminar por la Calle de la Amargura en símbolo de solidaridad por la princesa Cósmica. No hubo quien la salvara y menos de la muerte, el creador tenía su plan, pero también corría un alto riesgo; ya en la Tierra Star podría ampararse a la promesa de Cristo, pero en Heaven era imposible, J.C.R representaba a Los Redimidos y no a los ángeles, aquí nace la posibilidad y la esperanza de verle, al mismo tiempo el riesgo de perderla es más grande que la posibilidad de su regreso, pero era un riesgo que se iba a correr tanto para ella como para El celeste infinito. Todas las ciudades y mundos tenían sus banderas a mitad de poste como símbolo de dolor, al mismo tiempo había un silencio profundo en toda la Capital de la eterna vida.

Gabriel estaba a punto de arrojarla, de pronto, -el Juez dijo-, «Dejadme verla por última vez», -Él con lágrimas en los ojos se acercó a ella y le dijo-, «Hija mía toma mi collar, te protegerá de todo», la reliquia era un enorme diamante verde claro, -por último él dijo-, «Allá en la Tierra te llamarás Zafatia Star, también serás hermosa como la primavera en su plenitud, serás blanca y pura como la nieve de la antártica Sur, tu belleza alcanzará las más codiciadas Argentinas y estrella serás por la eternidad, adiós Star, adiós hija mía».

En ese instante la cápsula se prende y Star comenzó a llorar a grito abierto.

-En su desdicha clamaba-, -No padre, por favor, ten misericordia de mí, no me deseches, soy tu hija no lo olvides, no me deseches por favor, ten misericordia de mí-, sus súplicas desgarraron el corazón de todo el universo y del mismo Creador.